Los andrógenos son las hormonas sexuales masculinas, presentes en la sangre de hombres y mujeres. El hiperandrogenismo consiste en un exceso de la función de estas hormonas sobre la glándula sebácea estimulando una mayor producción de sebo y taponamiento del poro, dando lugar a las espinillas que son el primer paso del acné.
Es frecuente en mujeres adultas que tras tratamientos clásicos orales o tópicos o al suspender los anticonceptivos, el acné vuelva a aparecer meses o años después. Puede producirse además un empeoramiento del acné en período premenstrual por mayor acción de los andrógenos.
La causa más frecuente del hiperandrogenismo es el síndrome de ovario poliquístico (SOP), que es el trastorno endocrino más común en mujeres jóvenes. No es estrictamente necesario tener quistes en el ovario, sino que una paciente puede ser diagnosticada de SOP con la presencia de signos clínicos o analíticos de hiperandrogenismo y alteraciones de la ovulación. En el SOP además de los signos en la piel del hiperandrogenismo (hirsutismo, alopecia) pueden aparecer las siguientes manifestaciones:
- Menstruaciones irregulares.
- Dificultades para tener hijos.
- Ecografía con quistes en el ovario.
- Tendencia a la obesidad, alteraciones de la tensión arterial y de los lípidos (colesterol, triglicéridos) en sangre.
- Resistencia a la insulina con hiperglucemia con riesgo de desarrollar diabetes mellitus.
El síndrome SAHA es una patología que se manifiesta mediante Seborrea, Acné, Hirsutismo y Alopecia. Puede estar relacionado con SOP, predisposición genética, alteraciones de los andrógenos procedentes de ovario ó glándulas suprarrenales, o con un exceso de las hormonas prolactina o insulina.